MATERIALES.

Existen gran variedad de materiales en la práctica pedagógica y logopédica. El hecho de que las manifestaciones de cada paciente sean muy distintas de un sujeto a otro hace que la mayoría de los materiales que se utilizan sean elaboraciones propias del logopeda, según las necesidades que se le van presentando. Hay que considerar que un mismo material puede ser utilizado para patologías de naturaleza muy distinta. Así, aunque en principio se fabrique un material para un sujeto con un trastorno concreto, tendremos la certeza de que ese mismo material es susceptible de ser utilizado en otras ocasiones con otros pacientes de la misma o distinta patología. Así mismo, un material concreto puede utilizarse para intervenir en los distintos niveles del lenguaje. Por ejemplo, algo tan simple como la creación de tarjetas con dibujos puede servir para trabajar la fonología, al tener que nombrar el objeto que está viendo, seleccionando en este caso los dibujos que contengan los fonemas que queremos trabajar en el paciente. Estas tarjetas podrán utilizarse también para trabajar la semántica, eligiendo aquellos conceptos que el sujeto no tiene adquirido y que debería saber según su nivel de desarrollo y edad cronológica. La sintaxis se puede trabajar seleccionando tres de las tarjetas: una en la que aparezca un sujeto, en otra una acción y en la última un objeto, teniendo el sujeto que elaborar frases simples. Por último, la pragmática se podría trabajar a través del lenguaje referencial, por medio de la descripción de dibujos que comparten tanto el paciente como el terapeuta, en el que uno describe un dibujo y el otro tiene que averiguar de cual se trata.

Existen además editados una gran cantidad de materiales muy interesantes, siendo quizás la editorial CEPE la que ha publicado una mayor variedad de recursos de intervención logopédica. De entre ellos podríamos destacar los lotos de acciones (I, II, III, IV), el tren de palabras, comics para hablar (I, II, III), dialogue, ejercicios temporales (I, II, III), comprensión (I, II), ¿cuánto, combien, how much?, integración de fonemas en el lenguaje espontáneo, etc. y otros tan útiles como “Enséñame a hablar” o “Escucha, te cuento”, del Grupo editorial Universitario o “Activemos la Mente” diseñado por la fundación la “Caixa”. Otro tipo de material que podemos encontrar en el mercado son los manipulativos, destinados a trabajar la psicomotricidad gruesa y fina, la cognición, el lenguaje, etc. como son los puzzles, ábacos, pinzas...(que aporta también el paquete “activemos la mente” pero que podemos adquirir en cualquier establecimiento especializado).

Unos utensilios sencillos pero muy útiles empleados por las terapeutas son los depresores, espejos, velas, dulces...para trabajar las praxias, el soplo, etc.

Para los sujetos con mayores problemas de comunicación se aplicaban, entre otras estrategias, sistemas aumentativos/alternativos de comunicación, como el “bimodal” o el “Makaton”. Además, estos sistemas se pueden utilizar para estimular aspectos más concretos del lenguaje como la sintaxis, empleando por ejemplo, los símbolos del Makaton (cada símbolo tiene un referente: sujeto, verbo, objeto). Para los sujetos que presentaban problemas con la fonología, lectoescritura.., son muy útiles los gestos de apoyo a los fonemas (Monfort, M.1993).